El INE divulgó este
viernes los indicadores de pobreza e indigencia donde se muestra que hubo una
baja del 1.3% en la pobreza, 40.000 pobres menos, pero se mantuvo el nivel de indigentes
en 0,5%, unos 18.000 personas.
Una nueva baja de la
pobreza dejó de ser solo un dato de la sociedad y pasó a tener lecturas que van
desde la marcha de la economía hasta la evaluación de la políticas sociales.
La baja de la pobreza
es continua. En 2005 los indicadores de pobreza mostraba que Uruguay tenía un
36.6% de pobres. En 2013 se llegó a un 12.4% lo que significa la reducción a
1/3.
Los hogares pobres
tienen una composición mayoritaria de mujeres jefas de hogar y de
afrodescendientes.
El ministro de
Desarrollo Social, Daniel Olesker, dijo que desde 2004 el nivel de pobreza era
39,9 % y en 2012 disminuyó al 12,4 %. Aseguró que para 2015 se cumplirá la meta
de llegar al 10%. Dijo que esa baja es resultado de las políticas económicas y
sociales implementadas desde 2005 y aclaró que el 0,5% de indigencia responde
al límite inferior que se puede alcanzar pero que se trata con políticas
específicas para ese núcleo más duro.
Según cifras de CEPAL,
en 2011 Uruguay había llegado al valor más bajo de pobreza desde el año 1961, y
en 2012 se logró tener un índice aún más bajo.
Olesker explicó que
esta baja consecutiva durante ocho años también responde a que los ingresos de
los hogares reflejan un crecimiento sostenido y existe una mejoría en el nivel
de los ingresos, aumento del salario mínimo, mayor formalidad en el empleo y
acceso gratuito a servicios como la educación y la salud.
Señaló que "la
meta para este Gobierno es llegar al 10 % de índice de pobreza al final del período,
quedan dos años y estamos a 2,5 puntos porcentuales de cumplir la meta".
Agregó que en este período la pobreza fue disminuyendo de 3 a 4 puntos anuales,
inclusive 5 registrados en 2011.
En cuanto a la
indigencia, que es la situación de pobreza extrema en aquellos hogares cuyo
ingreso no supera la canasta básica de alimentos, señaló que se ubica en el 0,3
% de los hogares y 0,5 % de las personas, lo que significa que cada 1.000
personas, 5 se encuentran en situación de indigencia.
Recordó que en 2004 la
indigencia era del 4,7 %, implicando a unos 60.000 hogares. Explicó que la
cifra que va de 0,3 % a 0,5 % significa la pobreza más dura, aquellos que
vienen de una tercera o cuarta generación de pobreza estructural, los que
formaban parte de los asentamientos creados en la década del 60 y reprodujeron
generacionalmente esa situación.